La historia detrás

La idea de ministerio co-vocacional cruzó mi mente por primera vez hace más de una década, cuando el soporte económico para nuestra plantación sfue repentinamente reducido en un 30%. Mi primera preocupación fue encontrar una manera para proveer para mi esposa y nuestro bebé sin reuninar a nuestro sentido de llamado y la iglesia que acabábamos de comenzar. Consideré la idea co-vocacional por necesidad. A través de los años, comencé a ver el ministerio co-vocacional con nuevos ojos. Es un camino elejido por muchos dispuestos a hacer “lo que sea necesario“ con tal de ver que Jesús sea proclamado y su reino revelado en cada vecindario. Promueve una buena mayordomía de los recursos y talentos que Dios nos ha dado, especialmente cuando la iglesia es pequeña y el terreno de ministerio es difícil. No tiene límites. Provee ventajas estratégicas para la multiplicación y la plantación de iglesias en muchos contextos. Representa una alternativa hacia el crecimiento sostenible, formas contextualizadas de ministerio, y la multiplicación exponencial de discípulos. Fomenta movimientos del evangelio.

El ministerio co-vocacional ha sido la práctica mas común de líderes a través de la historia y a lo largo del mundo. Ha sido un factor decisivo en el crecimiento y la expansión del del evangelio frente a la adversidad, la persecución, y la escasez de recursos financierons. En toda Latino America, muchos pastores y líderes practican o han considerado la co-vocacionalidad como una alternativa para participar de la misión de Dios. Yo he tenido el privilegio de mentorear muchos de ellos, formal e informalmente, en lugares como México, Cuba, Argentina, y los Estados Unidos. He sido inspirado por su compromiso con el Señor Jesus y Su misión. He aprendido mucho de ellos.
Sin embargo, apesar de su validéz bíblica y su valor estratégico, muchas denominaciones e iglesias aun no han desarrollado procesos para impulsar plantadores co-vocacionales. Creemos que atender esta necesidad representa una oportunidad fantástica para el crecimiento del evangelio a lo largo de Latino América.

Pues la tierra se llenará del conocimiento de la gloria del Señor como las aguas cubren el mar.
— Habacuc 2:14